Porcelana de Alcora

Grupo escultórico con Alejandro Magno sobre Bucéfalo.

Busto del Conde de Aranda, en tierra de pipa, por Joaquín Ferrer, hacia 1790.

Porcelana de Alcora es el nombre de la porcelana fabricada en la Real Fábrica de Alcora o Real Fábrica de Loza y Porcelana, una manufactura real creada en 1727 en Alcora a iniciativa de Buenaventura Ximénez de Urrea y Abarca de Bolea, IX conde de Aranda (padre del posterior conde de Aranda Pedro Abarca de Bolea que formaría parte de los equipos de gobierno ilustrados de Carlos III de España y Carlos IV de España, y que fue quien impulsó esta manufactura de modo más destacado).

Inicialmente, un grupo de maestros franceses, José Olerys, Eduardo Roux y Sebastián Carbonel, fueron contratados como dibujante, pintor y modelador, respectivamente. El español José Ochando se formó en la fábrica como dibujante y maestro de talla; trabajando también artistas como el pintor Miguel Soliva (Cuenca ? - 1755). En 1736 la fábrica llegó a tener 136 empleados y una producción mensual de más de 25.000 piezas, que se redujeron a 90 empleados y 17.000 piezas en 1743, tras un periodo de crisis de ventas y reivindicaciones laborales de los aprendices. En los fondos de la Colección Espínola, existe un baldufario con una factura manuscrita el 26 de Junio de 1748, donde se data el precio de una adquisición de 50 piezas de la Real Fábrica, además de sus dibujos y colores.

No es hasta la segunda época de la fábrica, entre 1742 y 1798, cuando la fábrica alcanza su plenitud de producción y resultados. En la búsqueda de la realización de una porcelana verdadera, se contrató sucesivamente al francés François Haly, al alemán Johan Christian Knipfer, a los franceses François Martin, Pierre Cloosterman y Christoph Boull y al suizo Petro Reinhart. El producto logrado, tras numerosos ensayos fallidos, era similar a la porcelana francesa, y no se obtuvo la ansiada porcelana dura de estilo sajón. Se trabajaba con una gran variedad de técnicas y materiales, como la tierra de pipa y la mayólica, así como la loza de distintas calidades. Entre los maestros locales destacaron, además del citado José Ochando, Jacinto Causada y los modeladores Julián López y Joaquín Ferrer, además del prestigioso dibujante Julián Más , también natural de Alcora, que depués de haber trabajado como dibujante en la fábrica adquirió por méritos la plaza de Director de Dibujo y Grabado de la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos en Valencia.

La tercera época de la fábrica (que llegará hasta 1858) comienza en con el paso de la propiedad a los duques de Híjar al morir el conde de Aranda sin descendencia directa.^[1]

Véase también

• Museo de la Cerámica (Alcora)
• Porcelana del Buen Retiro
• Real Fábrica de La Moncloa

Notas

1. ↑ Fuente para todo el artículo: La Cerámica Valenciana, pgs. 177-192: La Real Fábrica de Alcora y sus imitadores.