Betula

Betula
«Abedul» redirige aquí. Para otro árbol llamado del mismo modo, véase Alnus glutinosa.
Para otros usos de este término, véase Abedul (desambiguación).
Commons-emblem-notice.svg
 
Abedul
Illustration Betula pendula0.jpg
Betula pendula
Clasificación científica
Reino: Plantae
División: Magnoliophyta
Clase: Magnoliopsida
Orden: Fagales
Familia: Betulaceae
Género: Betula
L.
Especies

Numerosas especies;
Lista de especies

Sinonimia
  • Betulaster Spach (1841).
  • Apterocaryon Opiz (1855).
  • Chamaebetula Opiz (1855).[1]

Abedul es el nombre común utilizado para designar diferentes árboles caducifolios, muy parecidos entre sí, del género Betula de la familia Betulaceae y del orden Fagales.

Su nombre procede del latín betūlla que a su vez procedería de la palabra betu que era como los celtas designaban al abedul.

El abedul sirve de alimento a un gran número de lepidópteros tales como Colotois pennaria, Campaea margaritata, Mimas tiliae, Drepana binaria, Geometra papilionaria, Hemithea aestivaria y Phalera bucephala.

Contenido

Morfología

  • Altura: entre 10 y 30 m, dependiendo de la especie
  • Hojas: simples, romboidales de 3 a 6 cm, variando ligeramente según la especie.
  • Ramas: flexibles y corteza blanquecina.
  • Flores: especie diclino monoico: el mismo árbol posee flores masculinas y femeninas con amentos amarillos o verdes. El polen posee tres poros, tiene forma esferoidal, de 20 a 25 µm de diámetro y superficie finamente granulada.
  • Distribución: se encuentra por una gran parte del hemisferio norte, en Europa (en los países nórdicos llegan a formar grandes bosques), en parte de Asia, Norte América y el norte de África.
  • Hábitat: requiere zonas soleadas, suelos ácidos y silíceos que posean suficiente humedad.

Especies

La siguiente lista no es completa y se refiere sólo a una clasificación por su origen geográfico. Para la clasificación taxonómica, véase Anexo:Especies de Betula.

Abedules de Norteamérica incluyen
Abedules de Europa y Asia
  • Betula albosinensis
    • Betula albosinensis var. septentrionalis - Abedul chino de corteza roja
  • Betula alnoides
  • Betula austrosinensis
  • Betula carpatica
  • Betula chinensis
  • Betula dalecarlica
  • Betula ermanii - Abedul de Erman.
  • Betula grossa
  • Betula jacquemontii (Betula utilis subsp. jacquemontii)
  • Betula kamtschatica - Abedul de Kamchatka platyphylla
  • Betula mandschurica
    • Betula mandschurica var. japonica
  • Betula maximowiczii - Abedul de Maximowicz.
  • Betula medwediewii
  • Betula nana - Abedul enano.
  • Betula pendula - Abedul común, abedul blanco.
  • Betula platyphylla (Betula pendula var. platyphylla)
  • Betula pubescens
    • Betula pubescens subspecies tortuosa
  • Betula szechuanica (Betula pendula var. szechuanica)
  • Betula utilis
Nota: muchos textos estadounidenses confunden B. pendula y B. pubescens, aunque son especies diferentes con distinto número de cromosomas

Aplicaciones

Los abedules son árboles versátiles. Tienen gran valor ornamental por su corteza plateada, y el colorido que adquiere su follaje durante el otoño. La savia, la corteza, las hojas, la madera, las ramitas, y las raíces se utilizan para el alimento, materiales de construcción, tratamientos medicinales, lubricantes y otros usos prácticos. Los esquimales se servían de ellos para confeccionar vestidos, construir piraguas y elaborar cuerdas, pues su corteza se mantiene muy bien por contar una sustancia conservadora, la betulina, casi indestructible. Los antiguos pastores utilizaban su corteza para elaborar su calzado. En Escocia se han encontrado en enterramientos de varios siglos cortezas en perfecto estado.

Por el contrario, su madera es muy vulnerable, utilizándose para hacer pasta de papel y tinta de imprenta. La madera se trabaja con facilidad y se utiliza para mangos de herramientas y otros objetos de pequeño tamaño, y es usada en Rusia para tallar las matrioshki, las famosas muñecas rusas, así como los skies. Su madera es excelente para el carbón. La corteza, dada su impermeabilidad, se utiliza para fabricar zuecos, canastas, cajas, etc. La corteza del abedul también tiene propiedades febrífugas y se administra en polvo en infusión, solo o acompañado con otra sustancia medicinal de cuyos principios se la quiera impregnar. Las ramas, por ser muy flexibles, se utilizan en cestería.

Por destilación, la corteza suministra un aceite resinoso balsámico especial, que en el norte de Europa es muy apreciado para la preparación del cuero fino (llamado “cuero de Rusia”), al que comunica un olor aromático muy característico, además de protegerlo de la acción de los insectos. La savia hervida es usada como enjuague bucal para las enfermedades de la garganta, ulceraciones de la boca, irritación de las encías, y una excelente loción detersiva para llagas y úlceras. Con las raíces se hace una pomada para la piel que ayuda a la cicatrización de heridas, los granos, la sarna, las erupciones y pústulas de la piel.

Este aceite, al igual que las hojas del abedul, proporcionan un colorante amarillo. Los extractos del abedul también se utilizan en domésticos como jabón o champú. El alquitrán del abedul, extraído de su corteza, se utiliza como lubricante y con fines medicinales. Los brotes de abedul crían unos hongos que se usaba en los países nórdicos para curar el alcoholismo.

Las hojas, sobre todo secas, ahuyentan las moscas y los tábanos que molestan a los animales domésticos. También se utilizan las hojas para hacer té con propiedades diuréticas y para la obtención de extractos para tintes y cosméticos. Las hojas secadas al sol son excelentes para los dolores reumáticos. Ayudan también a la transpiración de los pies evitando el mal olor. Otro uso que se da a las hojas frescas de este árbol es su aplicación sobre los pechos de las mujeres que amamantan, para aliviar el dolor y para contener la leche.

La savia del abedul se bebe como tónico o se añade al jarabe de abedul, vinagre, cerveza, bebidas refrescantes y otros alimentos. El jarabe del abedul es difícil de fabricar, lo que le hace más costoso que otros jarabes utilizados en alimentación.

Las ramillas del abedul, dada su flexibilidad y dureza, fueron utilizadas como instrumento de flagelación. En otros tiempos los profesores las utilizaban para hacerse respetar.

En el noroeste de España es muy empleado en plantaciones lineales de carreteras; en zonas de nieblas frecuentes son particularmente útiles, pues sus troncos destacan muy bien en la oscuridad. Muchas de las naciones indias de Norteamérica estimaban al abedul por su corteza, dado su peso ligero, su flexibilidad y la facilidad con la que podía ser pelada de los árboles, fue utilizada a menudo para la construcción de canoas. La corteza tiene un alto contenido de betulín y ácido betulínico, con propiedades farmacéuticas, y otros productos químicos utilizados en la fabricación de lubricantes industriales.

Mitología y simbolismo

Los abedules también tienen su importancia espiritual en varias religiones antiguas y modernas; al abedul siempre se le ha dado cualidades purificadoras en diferentes culturas a lo largo de la historia, en gran parte debido a sus usos medicinales. Sus hojas, flexibles pero rectas fueron usadas para espantar a los malos espíritus; en Japón, las mikos, mujeres sirvientes de los templos shinto japoneses, llevaban a cabo danzas ceremoniales en las que azotaban el aire con ramas de abedul para espantar a los onis; en España e Italia se plantaban abedules en la entrada de los establos para ahuyentar a los demonios y fantasmas; los chamanes de Norteamérica usaban las ramas de abedul para los exorcismos.

Con la misma finalidad también se fustigaba con ramas de abedul a delincuentes y dementes. Según la mitología cristiana se dice que el abedul crece en la entrada del Paraíso. La Inquisición medieval flagelaba a los reos culpados de delitos menores con las ramas de abedul y los inquisidores solían portarlas como un látigo cuando paseaban por el pueblo, hasta tal punto que se asoció el abedul a la Inquisición, llegando a tener su propio lenguaje dentro de ésta a través del árbol; una mujer que portase en el pelo una hoja o flor de abedul era intocable por tener el favor romántico de un inquisidor y no se la podía acusar de herejía, ni brujería, ni prostitución o adulterio; y las casas que adornaban su entrada con un ramillete de abedul eran familias cercanas a los jueces. Así mismo el símbolo del arcángel Azrael, el ángel de la muerte entre los judíos y musulmanes, es un abedul.

En la antigua Roma, el abedul era símbolo de poder y autoridad; se empleaban sus ramas para adornar las cabezas de las personas importantes, denominándose fasces, de donde viene el vocablo fascista.

En Rusia tiene una gran importancia la presencia del abedul, protagonista de innumerables canciones, cuentos, poesías, imágenes pictóricas o refranes, asociado con la pureza, las mujeres, la juventud y la maternidad. Entre los poemas más célebres están los de S. Yesenin como aquel que dice: «Abedul blanco bajo mi ventana a la que a nieve cubrió como si fuera plata» o «Se sonrieron los adormilados abedules, al despeinarse sus trenzas de seda»; poemas que siempre tienden a ensalzar la blancura de su tronco, concepto que viene de la propia etimología indoeuropea de la palabra que significa tanto brillante como blanco, por lo cual también es un símbolo de las doncellas. Antiguamente en Rusia también existía una deidad vinculada con el abedul llamada Bereguinya, diosa de los espíritus y de todas las riquezas de la tierra. Más tarde este árbol se transformaría en el símbolo femenino para la festividad que celebraba en Marzo, una fiesta llamada Siemika.

En Japón además de tener su función en los rituales sintoístas como ya se ha mencionado, tenía una función como lenguaje del amor en las mujeres: cuando una mujer llevaba una flor de abedul significaba que estaba disponible y regalarle dicha flor a un hombre era una declaración romántica; una ramita desnuda significaba que la relación no podía llevarse a cabo; las raíces que estaba casada; las hojas que aunque estuviese casada estaba abierta a una relación extramatrimonial.

Para los celtas era un árbol sagrado; era el árbol de comienzo, símbolo de la renovación, de las nuevas oportunidades, lo que vuelve a nacer. Esto se debe a que es de todos los árboles, el primero que echa nuevas hojas. Su mes lunar es del veinticuatro de diciembre hasta el veinte de enero.

Galería de imágenes

Referencias

  1. «Betula». Royal Botanic Gardens, Kew: World Checklist of Selected Plant Families. Consultado el 26 de diciembre de 2009.

Bibliografía

  • Alan Mitchell, A Field Guide to the Trees of Britain and Northern Europe, William Collins Sons & Co. Ltd., 1974 – ISBN 0 00 212035 6.
  • Benigni, R; Capra, C; Cattorini, P. Piante Medicinali. Chimica, Farmacologia e Terapia. Milano: Inverni & Della Beffa, 1962, pp. 141-3
  • Bernard Bertrand, Le Bouleau, l'arbre à la peau d'argent, 01/10/2007, Terran (Editions de) - ISBN 978-2-913288-71-3
  • Bézanger-Beauquesne, L; Pinkas, M; Torck, M. Les Plantes dans la Therapeutique Moderne. 2ª. Paris: Maloine, 1986, pp. 106-7
  • Bézanger-Beauquesne, L; Pinkas, M; Torck, M; Trotin, F. Plantes Médicinales des Regions Tempérées. Paris: Maloine, 1980, pp. 70-1.
  • Carnat A, Lacouture I, Fraisse D et al. Standarization of the Birch Leaf. Ann Pharm Fr, 1996; 54(5): 231-5.
  • Demirci B, Baser KH, Ozek T et al. Betulenols from Betula Species. Planta Med 2000; 66(5): 490-3.
  • European Scientific Cooperative On Phytotherapy (E.S.C.O.P.). Monographs on the medicinal uses of plant drugs. Fascicle I: Betulae folium (Birch Leaf). March 1996, 4 pp.
  • Falinski J.B. – Mortier F. 1996. Biodiversité et gestion durable des forêts en Europe. Nº especial de 1996 de Revue Forestière FranV aise , pp89-116
  • Fernández, M; Nieto, A. Plantas Medicinales. Pamplona: Ediciones Universidad de Navarra, 1982, p. 43.
  • Jacques Brosse, Larousse des Arbres et des Arbustes, Larousse-Bordas, 2000 – ISBN 2 03 505172 X.
  • Lastra, JJ; Bachiller, LI. Plantas Medicinales en Asturias y la Cornisa Cantábrica. Gijón: Ediciones Trea, 1997, pp. 87-9.
  • Loew, D; Heimsoth, V; Kuntz, E; Schilcher, H. Fitofármacos, farmacología y clínica de los "diuréticos vegetales". En: Diuréticos: Química, farmacología y terapéutica, incluida fitoterapia. Barcelona: Salvat, 1991, pp. 233-259.
  • Mulet, L. Estudio Etnobotánico de la Provincia de Castellón. Castellón: Diputación Provincial, 1991, pp. 86-7.
  • Paris, RR; Moyse, M. Précis de Matière Médicale. Tome II. Paris: Masson, 1967, p. 92.
  • Peris, JB; Stübing, G; Vanaclocha, B. Fitoterapia Aplicada. Valencia: M.I. Colegio Oficial de Farmacéuticos, 1995, pp. 105-6.
  • P. FONT QUER in Collect. Bot. (Barcelona) 1: 261-314 (1947);
  • PDR for Herbal Medicines. Medical Economics Company, Montvale. Second Edition, 2000; pp 78-80.
  • Roger Phillips, Trees in Britain, Europe and North America, Pan Books, 1978 – ISBN 0 33 025480 4
  • Salminen JP, Ossipov V, Haukioja E et al. Seasonal variation in the content of hydrolysable tannins in leaves of betula pubescens. Phytochemistry 2001; 57(1): 15-22.
  • Van Hellemont, J. Compendium de Phytotherapie. Bruxelles: Association Pharmaceutique Belge, 1986, pp. 65-7.
  • Vasilenko IK, Semenchenko VF, Frolova LM et al. The pharmacological properties of the triterpenoids from birch bark. Eksp Klin Farmakol 1993; 56(4): 53-5.
  • Villar, L; Palacín, JM; Calvo, C; Gómez, D; Montserrat, G. Plantas Medicinales del Pirineo Aragonés y demás tierrras oscenses. 2ª. Huesca: Diputación Provincial, 1992, p. 48.
  • Wichtl, M. Herbal Drugs and Phytopharmaceutical. A Handbook for Practice on a Scientific basis. Stuttgart: Medpharm Scientific Publishers, 1994, pp. 106-8.
  • Zaragozá F, Ladero M, Rabasco AM et al. Plantas Medicinales (Fitoterapia Práctica). Segunda Edición, 2001. pp 136-8.

Enlaces externos


Wikimedia foundation. 2010.

Игры ⚽ Нужна курсовая?

Mira otros diccionarios:

  • BETULA — arboris genus est, de qua sic Plin. l. 16. c. 18. Gaudet frigidis forbus et magis etiam Betula. Gallica haec arbor mirabili candore atque tenuitate, terribilis Magistratuum virgis. Eadem circulis flexilis, item corbium sportis. Bittumen ex ea… …   Hofmann J. Lexicon universale

  • Betula — genus of the birches, from L. betula birch, from Gaul. betu bitumen (Cf. M.Ir. beithe box tree, Welsh bedwen birch tree ). According to Pliny, so called because the Gauls extracted tar from birches. Birch tar is still sold as an analgesic and… …   Etymology dictionary

  • Betŭla — (B. L.), Pflanzengattung aus der Familie der Betulaceae, der Monöcie Polyandrie L., Waldbäume u. Sträucher der gemäßigten u. kalten nördlichen Zone, einhäusig, männliche Blüthen in Kätzchen, Schuppen gestielt, eiblüthig mit 2 Läppchen unter der… …   Pierer's Universal-Lexikon

  • Betŭla — L., s. Birke …   Meyers Großes Konversations-Lexikon

  • Betula — Betŭla (lat.), die Birke …   Kleines Konversations-Lexikon

  • betulă — BETÚLĂ s. v. mesteacăn. Trimis de siveco, 13.09.2007. Sursa: Sinonime …   Dicționar Român

  • bétula — s. f. [Botânica] Planta betulácea típica. = VIDO, VIDOEIRO …   Dicionário da Língua Portuguesa

  • betula — bȅtula ž DEFINICIJA razg. pejor. neugledan ugostiteljski objekt; birtija, bircuz ETIMOLOGIJA tal. bettola …   Hrvatski jezični portal

  • Betula — Bouleau Wikipédia …   Wikipédia en Français

  • Betula — noun a genus of trees of the family Betulaceae (such as birches) • Syn: ↑genus Betula • Hypernyms: ↑hamamelid dicot genus • Member Holonyms: ↑Betulaceae, ↑family Betulaceae, ↑birch family …   Useful english dictionary

Compartir el artículo y extractos

Link directo
Do a right-click on the link above
and select “Copy Link”