Abogacía

Abogacía es el conjunto de prácticas que buscan interceder o hablar en favor de una causa hasta modificar las políticas públicas a favor de esta. El principal objetivo es lograr la modificación o establecimiento de leyes que favorezcan la causa defendida. En inglés el término que mejor refiere estas prácticas es advocacy.^[1]

La difusión de un tema o el establecimiento de relaciones públicas para interactuar con otros actores sociales, no pueden ser considerados actos de abogacía por sí solos. El elemento fundamental que diferencia a la abogacía de la comunicación, la educación o las relaciones públicas es la intención de modificar las leyes, reglamentos o políticas públicas. Debido a este punto fundamental, la abogacía parte y se sostiene gracias a un análisis político. Una buena abogacía parte de un buen análisis político: identificar la política, regulación o ley a modificar o promover, el escenario, identificación de los actores, la medición de sus fuerzas y sus relaciones.

Un error muy común que vemos en la gente que ejecuta abogacía por primera vez, es el no identificar la relevancia de sus acciones. Por ejemplo, se dedican a repartir volantes en las calles con la esperanza de concientizar a la gente sobre un problema. Si bien esto puede ser parte de una buena estrategía de relaciones públicas, no se puede reconocer cómo abogacía a menos que: hayan identificado a los transeuntes como actores significativos en el escenario político o con una fuerza significativa en ello.

Tipos

La abogacía, por el escenario donde se desarrolla, puede ser comunitaria, estatal, nacional, en medios masivos, etc.

Abogacía en los medios de comunicación

El objetivo de abogacía en medios es propulsar políticas específicas mediante la cobertura de los medios de información de un tema en particular.^[2] Se ha mencionado que las notas y artículos informativos en medios de comunicación tienen más impacto en las leyes y políticas que los artículos y documentos científicos publicados sobre el mismo tema.^[3] La abogacía recurre tarde o temprano al uso de medios de comunicación masivos para aumentar su efectividad.

La cobertura de los medios a un tema particular puede ser pagada -como las campañas publicitarias- o no pagada -como la cobertura noticiosa-. La cobertura de los medios puede ser a través de tiempo aire o área impresa. Dos dimensiones tiene la medición de cobertura: frecuencia y sobresaliencia. La medición iniciaría por registrar y obtener las noticias que tocan el tema y que aparecen en medios masivos: periódicos, radio, TV e Internet. Además del número de veces que es tocado el tema, se debe clasificar por el grado de sobresaliencia de las notas, anuncios y espacios pagados en medios. Una vez convertido a esta unidad común de medición, se podría emitir un reporte del grado de emisión de noticias relacionadas en medios.^[4]

Referencias

1. ↑ www.care.org/getinvolved/advocacy/
2. ↑ [Wallack, et al. Media advocacy and public health: power for prevention]
3. ↑ [Ashbridge M. Public place restrictions on smkng n Canada: Assesing the role of the state, media, science and public health advocacy. Soc Scl Med 2004; 58:13-24]
4. ↑ [ Llaguno S, Villalobos V, et al. Análisis de la cobertura del tema de tabaco en medios impresos mexicanos. [Analysis of coverage of the tobacco issue in mexican print media]. Sal Pub Mex. 2008,50:S3]

Enlaces externos