Gabrielle Marianus Salerno

Gabrielle Marianus Salerno

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Primeros años

Su nombre de bautismo era Gabrielle Marianus Salerno, sin embargo pasó a la historia como Salernino. Nació en la ciudad de Padua en el año 1487, hijo de una familia de comerciantes prósperos de la ciudad. Desde su niñez mostró una gran inclinación por las artes plásticas, además de un interés profundo por el conocimiento filosófico y político. Teniendo 5 años su familia se mudó a la próspera ciudad de Firenzepara ampliar sus posibilidades de crecimiento.

Adolescencia y Juventud

A la temprana edad de 10 años, este niño piadoso, comenzó a entender como excesos los eventos ocurridos en la “Hoguera de las Vanidades”, y utilizando las influencias de su padre, se contactó con el obispo de Firenze de la época, Julius Grassii, ante quien denunció los excesos de Girolamo Savonarola, dando por resultado la excomunión y posterior quema del reformador y religioso italiano. Su adolescencia fue marcada por el encuentro con Michelangelo, hecho sucedido en el 1503, cuando Salernino, un joven apasionado por la perfección de la forma humana, le hace una corrección en la mano del David que estaba realizando. A partir de ese momento, Gabrielle fue el ayudante dilecto del joven Buonarroti. Giorgio Vasari, cuenta en la biografía del gran artista, que en sus charlas vespertinas con el joven Salernino, surgieron las ideas de una basílica mayor a la de Florencia, realizar distintos tipos de “pietá” y retratar personajes del antiguo testamento.

En 1505, partió de Firenze hacia Bologna, donde cursó sus estudios de derecho, participando de los grandes debates de la época. Siendo estudiante comenzó a delinear un escrito sobre el modo de vida del hombre renacentista, que se transformó en su primer éxito literario. “Il tabernero felice” rápidamente entró en contradicción con “El Cortesano” de Baltasar de Castiglione. Contrariando la antemencionada obra, il tabernero felice resalta el modo de vida de cantina, donde todo hombre debe saber tomar, seducir mujeres, poder sostener cualquier disquisición filosófica con fundamentos e incluso batirse a duelo por cualquier nimiedad, todo en una misma noche en conjunto con ciertos pensamientos cuasinihilistas.

Fue hacia 1513 cuando escribió "De venditio indulgentiam" donde expresó como anatema la venta de indulgencias y quienes la practican. De venditio indulgentiam, se conformó como una de las obras cumbres de la “devotio moderna” junto con obras como “Imitación de Cristo” de Tomás de Kempis y los escritos de Erasmo de Rotterdam. Hacia 1516, el libro es adquirido por Martín, un monje Agustino de la ciudad de Wittemberg, quien lo utilizará como base de por lo menos 10 de las 95 tesis y paradójicamente, también fue utilizado como fundamento para la condena al clérigo, en la bula Decet Romanum pontificem.

Durante este período, conocerá a Anina Vazquezini, una joven plebeya florentina con quien contraerá matrimonio, y fruto de la relación nacerá Valentino Salernino, quien a fines del siglo XVI será un reconocido arquitecto.

Adultez

Ante la grave crisis política que sacudió a Firenze, Salerno ve la necesidad de retornar a la ciudad en la que creció, para poder brindarle la ayuda profesional que su ciudad adoptiva necesita. Sin embargo, y para su gran sorpresa, no encuentra a su compañero Nicoló Maquiavelo, con quien había compartido largas discusiones de taberna sobre el buen gobierno. Es así, que lo va a visitar a San Casciano, donde el propio Nicolás le entrega el borrador de una obra sobre los factores a implementarse para poder gobernar. Las grandes correcciones que le realiza el librepensador Salernino, le costaron la amistad para con el precursor de la política moderna. Los biógrafos de Maquiavelo, coinciden en que las ideas que ocasionaron la pelea con Salerno contribuyeron a la fundamentación de los conceptos generales de Discursos de la primera década de Tito Livio.

Siendo un joven abogado, en 1527, su interés intelectual se vio interrumpido por la necesidad de defender a su patria de los avances imperialista de Carlos V. Así pues, se alistó bajo el mando de Francesco Guicciardini, con quien compartió grandes reflexiones sobre la historia de Italia. Los ejércitos enemigos compuestos de españoles y mercenarios alemanes estaban al mando de Carlos, Duque de Borbón. A pesar de la superioridad numérica, las bravas fuerzas italianas se enfrentaron a los invasores para defender a Roma. La Legione Salerniana, se batió con fiereza eliminando en primer lugar al ala de infantería española en las puertas de San Giovanni Laterano. A pesar de su victoria parcial, las otras secciones del ejército de Guicciardini eran vencidas por el duque de Borbón. Sin pensar en su éxito reciente y haciendo uso de su habilidad táctica, Salernino se avalanzó sobre la caballería del duque, en la zona de las termas de Caracalla, causando la muerte del líder español. A pesar de haber matado a Carlos III, la victoria no fue posible a causa de la abismal superioridad numérica y armamentística del enemigo que provocó la huída de la Legione Salernniana, siendo esta la última en retirarse y la que mejor combatió en la batalla. La incapacidad de poder defender al Papa y a la ciudad eterna del saqueo de los salvajes fue una de las grandes heridas que acompañó a Salernino toda su vida y lo obligó a refugiarse en el cariño de las jóvenes mujeres de su tierra.

Esta batalla, conocida como la victoria trunca de las termas de caracalla, fue inmortalizada varios años después en dos obras cúlmines, primeramente Francesco Guicciardini, su antiguo comandante, desarrolla su bravura en Storia d´Italia y Donatello cuando se cumplieron 20 años de aquella famosa batalla, lo glorifica en el Gattamelata, una estatua ecuestre en su honor, también conocida como “Il Salernino vincitori”. Un año antes de su muerte, en 1533, el Papa Clemente VII en agradecimiento por su bravura, invistió a Salernino con el título de “Defensoris Papae et Cristiani”

Hacia 1539, asesora en los asuntos de gobierno a Cosme de Medici, inspirándose en la labor de Cayo Clinio Mecenas, se consolida como uno de los mentores del financiamiento a los artistas. Durante este período, Salernino en sus momentos de distensión comienza a pintar y a esculpir, tomando como base las enseñanzas recibidas por su amigo y maestro Michelangelo, quien en esos momentos se encontraba en Roma. Sus obras como "Dama in Bolina" "Molte curve e io senza freni" y "Trincata della Donna" son sus máximos exponentes y se pueden visitar en la Galería de Uffizi, la cual fue ideada como edificio burocrático por el librepensador de Padua, para centralizar los trabajos del servicio civil florentino.

Ultimos Años

Los avatares de la convulsionada Firenze, agotaron al gran personaje que decidió dar por finalizada su función y vida pública, emprendiendo en 1555 su retiro hacia la zona de Amalfi.

En su casa de campo, frente a la costa y con sus viñedos, Gabrielle es visitado por un viejo amigo, un cirujano de Alcalá de Henares, de nombre Rodrigo de Cervantes, con quien compartió grandes momentos cuando cumplía función pública en Florencia. En dicha estadía Salernino le contaba una historia burlesca de caballeros locos al pequeño Miguel, hijo de su amigo, para que pudiese dormir bien.

Los últimos años de su vida los pasó cultivando sus vides, escribiendo y pintando, sin dejar de perder su espíritu festivo y profundo a la vez. Escribió entre otras obras, “Rerum Inmortalum” sobre la esencia del arte y el librepensar, en alemán escribió un tratado contra la sodomía “Die Schwull und die anderen” y analizó el cambio del sistema económico en “Capitalismus Ferus” texto utilizado por Adam Smith como por el mismísimo Kart Marx.

En la noche del 19 junio del 1560, Salernino se encontraba en una de sus tantas tertulias con mancebas, en la cual contaba su ingente anecdotario. Al momento de compartir de manera íntima ciertos relatos falleció en la cama rodeado de ellas y de vino de sus viñedos. En ese clima festivo, se apagaba una de las más grandes personalidades del renacimiento europeo.

Sus obras perduran hasta la actualidad y continúan siendo motivo de arduos debates entre los intelectuales de las distintas ramas del arte y la ciencia. Su vida es el ejemplo típico de un personaje renacentista y por sobre toda las cosas, un conocedor profundo de la esencia humana.

Datos Curiosos

- Los viñedos de Salernino continúan hasta la actualidad en actividad pertenecen a las bodegas “La gioia delle donne”

- Durante su estadía en Amalfi fue conocido como “il vecchio verdino alegro” por la alegría que desparramaba entre las jóvenes de la costiera amalfitana, cuya característica principal son sus verdes prados.

- Según Girólamo Stromboli, uno de los biógrafos de Maquiavelo, su famosa cicatriz del pómulo izquierdo, corresponde a la pelea que tuvo con Salernino, quien en esa época poseía un cuerpo trabajado en el Gymnasium Magnum de San Cristoforo, Firenze.

- Dice la leyenda que a mediados de 1554, cansado de las dificultades de la vida pública de Firenze, Salernino se asomó en una de las ventanas del Palazzo Vecchio, tomando con su mano izquierda en alto los libros de actividades palaciegas y gritó “Siamo fuori” y los dejó caer al piso desde la altura. Esa imagen de un hombre sosteniendo con el brazo izquierdo en alto, iluminó a Benvenuto Cellini para realizar el Perseo que hoy está situado a metros de donde ocurrió el evento.

- Baltasar de Castiglione, era un hombre de armas tomar, al sentir que su obra era contrariada por Salernino, lo retó a duelo. El evento fue de relevancia en toda la región. Se encontraron en Mantua a la hora señalada, enormes caravanas en apoyo a Salernino llegaron de todos lados de la península durante todo el día, las 4 personas en favor de Baltasar llegaron justo para ver como su preferido era derribado por Salernino. La famosa renguera de Castiglione, fue provocada por el bon vivant de Padua.

- Sus seguidores editaron los escritos que guardaba de su infancia, cuando condenó la actitud de Savonarola. “Il bambino e il Cardinale Grassii“ es un resumen sobre sus conversasiones con Julius Grassii, cuando Salernino era un niño y denunciaba con la madurez de un adulto los actos del monje florentino.

- Uno de los escritos que más contrariedad le causó a Salernino fue De venditio indulgentiam, sabér que fue una de las bases del cisma luterano, como así también de la condena al monje alemán, llevó al sensible italiano a decir una de sus frases más recordadas “Me hanno cortato le gambe”

Bibliografía

Vasari, Giorgio “Life of Michelangelo.” Alba House, Washington, 2003.

Stromboli, Girólamo “Nicoló Maquiaveli un stronzo” Libri grati, Roma, 2001.

Falconi, Martini “Mi amico Salernino, una vita piena di festa” Il mondo, San Cristobal, 2008.

Rummenigge, Karl Heinz “Die Luteran cismus und die Salerninen influenz“ Pasculi editzion, Berlin, 1999.

Grassi, Julius “Felices il bambini. Come ho deposto a Savonarola” Ed. Parvulus, Roma, 1998.

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