Laguna de las Momias

La Laguna de las Momias es una laguna que queda en departamento de Amazonas en el Perú.

En medio del manto de tupida vegetación tropical que cubre las arrugadas faldas del flanco oriental de la cordillera andina o Andes amazónicos, allí donde el hombre jamás llegó a establecerse, peones del ganadero Ullilén, de Leimebamba, en el departamento de Amazonas, avistaron casualmente a inicios de 1997, un grupo de mausoleos Chachapoyas, ignorando que estas valiosas construcciones funerarias guardaban celosamente en su interior un verdadero milagro arqueológico.

Al tomar conocimiento de esa olvidada necrópolis el arqueólogo Federico Kauffmann Doig, gracias a noticias difundidas por el antropólogio y periodista Álvaro Rocha, procedió a organizar de inmediato una expedición.

Hacia aquel solitario sitio se desplazó Kauffmann Doig en mayo de 1997 con la primera expedición que contó con arqueólogos profesionales, luego de la inspección efectuada por funcionarios del Instituto Nacional de Cultura con sede en la ciudad de Chachapoyas. La expedición fue conducida por Kauffmann y contó con el patrocinio del Gobierno del Perú a través de PROMPERÚ

De Leimebamba, puerta de entrada al lugar de los mausoleos, hay una distancia que se recorre en unas 15 horas, la primera mitad de las cuales puede hacerse a lomo de mulas. En adelante, la ruta se torna penosa por los peligrosos pantanos y el tupido bosque tropical que deben ser transitados a pie por un territorio de selva virgen, deshabitado por el hombre.

Rodeados de un silencio sepulcral, los mausoleos ocupan una gruta natural de muy difícil acceso, esculpida en la pared de un peñón que emerge de una laguna, sin nombre en las cartas geográficas, hoy bautizada como Laguna de las Momias. Se trata de cubículos que imitan viviendas, construidas por los antiguos chachapoyas para dar sepultura a sus difuntos ilustres.

Los mausoleos de la Laguna de las Momias estaban aún repletos de fardos funerarios, sumandoéstos aproximadamente dos centenares. Sólo una pequeña parte había sido removida por los peones de Ullilén, que al no hallar el oro apetecido interrumpieron su acción depredadora. Por lo mismo, el presenta hallazgo representaba un auténtico milagro arqueológico.

Las recomendaciones entragadas por escrito por Federico Kaufmann Doig al Instituto Nacional de Cultura para que sólo contadas momias fueran retiradas de sus mausoleos con fines de estudio, y que las demás quedaran en su emplazamiento original, debidamente protegidas, fueron desoídas. Estos fardos funerarios terminaron, todos ellos, siendo retirados de sus mausoleos. Trasladados en burros y mulas a Leimebamba, en la actualidad se encuentran depositados en el Museo de Sitio de la localidad.

En los mausoleos eran sepultados personajes chachapoyas de alta jerarquía y, en algunos casos, sus vástagos muertos a temprana edad. Durante el dominio incaico de la región, también lo fueron funcionarios cusqueños que residían en Cochabamba, a una jornada de la Laguna de las momias., siguiendo antiguas tradiciones de los chachapoyas. Los cubos funerarios que integran los mausoleos están conformados por sólo tres paredes, ya que el lado posterior está la peña que hace las veces de muro. Se elevan por unos seis metros y presentan dos niveles o pisos. En cada cubo iban apilados, sobre una especie de tarima, una treintena de fardos funerarios.

El piso superior de cada mausoleo presenta una ventana con jambas, dintel y umbral construidos con grandes monolitos planos. Las ventanas presentan una leve inclinación trapezoidal y tuvieron por función la renovación del aire, para evitar que los fardos funerarios y las momias terminaran por desintegrarse por efecto del alto grado de la humedad ambiental.

Seis suman los mausoleos que conforman el Grupo 1 de la laguna de las momias. Elaborados con mampostería careada, sus paredes exteriores estuvieron cubiertas con una pasta arcillosa enlucida de color blanco, la que luego fue coloreada con bandas rojas en algunos tramos.

Las paredes van ornamentadas con grecas que forman motivos simbólicos, en cuya realización se han utilizado las mismas piedras constitutivas del muro. Se trata de un emblema en forma de "M" comtinuadas y extendidas horizontalmente. Frecuentemente repetido en la arquitectura Chachapoyas, interpretamos este motivo como un símbolo ornitomorfo vinculado con el culto especial que se rendía en el mundo mágico religioso andino a las aves de rapiña.

El fardo funerario está constituido por una momia en posición sentada, envuelta en tejidos tanto llanos como decorados. Una tela blanca que va cosida en sus extremos y sujetada con cuerdas, envuelve exteriormente el bulto funerario. Sobre este superficie es en algunos casos retratada una cara humana, confeccionada madiante pespuntes de hiki grueso. El proceso de momificación debió emplear sofisticadas técnicas, a juzgar por los excelentes resultados obtenidos, que ciertamente son en extremo difíciles de lograr debido al alto grado de humedad que reina en la región.

Cabe mencionar que varias docenas de grupos de mausoleos, similares a los de la Laguna de las Momias, fueron identificados y estudiados en territorio de los antiguos chachapoyas desde 1980, en quince de las expediciones Antisuyo ejecutadas por el Instituto de Arqueología de la Amazonia y el Centro Studi Ricerche Ligabue de Venecia (Italia), que fueron conducidas por Federico Kauffmann Doig y el antropólogo Giancarlo Ligabue. Pero a excepción de los de la Laguna de las Momias, todos los mausoleos reconocidos hasta entonces por las expediciones Antisuyo habían sido vaciados de su contenido funerario, dejando en algunos sitios sólo residuos.

Estos actos depredatorios se iniciaron con el fervor misionero desplegado en los siglos XVI y XVII, que desembocó en una cacería de momias destinada a extirpar los resabios de idolatría. Ya en nuestros tiempo, los mausoleos aún no violentados terminaron por ser desvalijados por profanadores interesados en apropiarse de los objetos de valor que habrían formado parte del ajuar funerario de los personajes de alto rango, ahí enterrados.

Véase también

• Distrito de Leymebamba (Chachapoyas)
• Provincia de Chachapoyas
• Región Amazonas
• Perú

Coordenadas: 6°51′0″S 77°42′0″W / -6.85, -77.7