Publio Ventidio Baso

Publio Ventidio Baso

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Publio Ventidio Baso fue un militar y político de la época final de la República Romana, leal partidario de Cayo Julio César.

Ventidio era natural de Piceno. Él y su madre habían sido hechos prisioneros durante la Guerra Social (91–88 a. C.), y desfilaron en el triunfo del cónsul Cneo Pompeyo Estrabón por las calles de Roma. Obligado a trabajar como mulero, vio en el ejército romano un medio a través del que alcanzar la gloria. Durante la Guerra de las Galias su habilidad militar llamó la atención de Julio César, quien, aunque no le menciona en su obra, De Bello Gallico, lo contaba entre sus protegidos. Se le proporcionaron varios mandos durante el conflicto en los que demostró estar dotado de una considerable destreza como militar.

Tras el estallido de las hostilidades entre Marco Antonio y Cayo Julio César Octaviano, optó por permanecer neutral, alineándose momentáneamente con Antonio. Tras la formación del Segundo Triunvirato, se le nombró consul suffectus. Durante la estancia de Antonio en Egipto (41 a. C.) no auxilió a Lucio Antonio y Fulvia - el hermano y la mujer de Marco Antonio - en su lucha con Octaviano.

Cuando el Imperio Parto invadió la provincia de Siria (40 a. C.), Marco Antonio le envió al mando de varias legiones veteranas de César con la misión de expulsar a los invasores. Ventidio no sólo venció a los orientales en tres batallas y les expulsó de territorio romano, sino que se mató a tres de los mejores comandantes del Imperio Parto durante las batallas.

Relevado del mando, volvió a Roma, dónde celebró un triunfo en recompensa de su victoria. Es el único comandante romano al que se le recompensó con tal honor tras vencer al Imperio Parto, que derrotó a militares tan diestros como Marco Licinio Craso y Marco Antonio, cuyos ejércitos sufrieron una aniquilación total.

Ventidio aparece brevemente en la obra de William Shakespeare, Antonio y Cleopatra donde se le representa comandando a su ejército frente a los partos. En la obra, se encuentra reflexionando si esta gran victoria levantaría los celos y las envidias de sus superiores y tras esta reflexión, desaparece de la obra.

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